Sí, al final de todo, Ella tuvo OCHO perritos y la historia se ha desarrollado de la siguiente manera: la Directora de la Universidad ya dio la orden de que no se moleste a la perra.
Entre el personal de vigilancia y el de intendencia (algunos de ellos, valga aclarar) se han estado haciendo cargo de Ella, al ser quienes más tiempo pasan ahí. Mención especial merece Don Blas, el vigilante del turno nocturno: luego de hablar conmigo, el sábado, ha comenzado a hacer una colecta para pagar la esterilización de Ella tan pronto como deje de amamantar a los OCHO perritos. "Mire, Profe, Ella se puede quedar aquí. Es muy buena gente y aquí la queremos mucho. Pero lo que si no se puede es que se queden aquí los OCHO perritos. Al rato la Directora nos corre con todo y animales y adónde vamos a dar".
En lo que a mí toca, ya he andado preguntando por la Protectora de Animales en Toluca, para ver cómo se canaliza lo de la operación de Ella... y para ver dónde colocamos a los perritos. Al parecer, ya acomodé uno con una vecina de la casa; sin embargo, faltarían siete.
En otro orden de cosas, estoy muy emocionado con lo de la tesis y en gran parte a ello se debe que tenga el güeblog tan abandonado. Sé que hay muchas cosas por contar, comentarios por escribir y etc etc y que mientras no me muera, queda tiempo para hacerlo.
Por lo pronto, me he estado dedicando a restaurar los nexos amistosos con algunas personas, sobre todo del DF, que a mis amistades de allá las he tenido MUY abandonadas durante los últimos cuatro años y, la verdad, no es justo.
En fin. Ya andaré por aquí más seguido... i really hope so
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