miércoles, julio 11, 2007

Los cuentos de Lilus Kikus

La primera vez que leí algo de Elena Poniatowska fue en la época de bachillerato, cuando era un lector tan primerizo como falto de tacto para seleccionar mi material de lectura. De aquella época datan “fracasos” como un primer acercamiento a la narrativa de Borges o a esos tabicones de Marcel Proust. Claro que también hubo maravillas del tipo Virginia Woolf o Julio Cortázar (por citar a dos a quienes me acerqué vía el influjo de Ulalume González de León).
Y hubo obras que me dejaron sin frío ni calor, como fue el caso de De noche vienes, de Poniatowska. Eso, sus continuas apariciones en entrevistas televisivas y de medios impresos, junto con el “boom” de la literatura escrita por mujeres, me hicieron verla con recelo... un recelo que habría de permanecer hasta el año 2000, cuando en mi curso de literatura mexicana ii, del colmex, salió por ahí que íbamos a leer Lilus Kikus y La flor de Lis.
Debo confesar que Lilus Kikus me dejó gratamente impresionado (La flor de Lis la leí años después y me dejó con cara de asombro). Pertenece a ese familia de relatos de la infancia en la que van también varios de los cuentos de Elena Garro en La semana de colores o esa otra ignorada maravilla que es El hombre de los hongos, de Sergio Galindo, o algunos de los relatos de Ulalume, contenidos en A cada rato lunes (pero en la edición de Joaquín Mortiz de 1970, vale aclarar)... y creo que incluso aquello de Las batallas en el desierto, de José Emilio Pacheco, por mencionar algunos nombres, sólo algunos... Resulta bastante significativo que este tipo de textos se halle como muy al margen de los intereses lectores tanto de quienes leen por el gusto de hacerlo como de quienes dicen dedicarse a los estudios literarios con tintes académicos...
¿Y qué tiene que ver una cosa con otra? Nada, que el domingo fui al DF y junto con Sergio Aguillón, nos fuimos a ver libros y en una librería de viejo me encontré con la segunda edición de Lilus Kikus, publicada por la Editorial de la Universidad Veracruzana, en 1967, justo cuando Sergio Galindo era su director. Luego, en otra librería, también de viejo, vi por ahí la única edición, en Joaquín Mortiz, de El hombre de los hongos... y aunque ya tengo dos (la edición privada y la de Mortiz), el libro estaba en tan buen estado, que dije “venga a nos Tu Reino” y me lo compré.
En las solapas de Los cuentos de Lilus Kikus (porque hay que aclarar que así se llama en la edición de la UV) aparecen 73 títulos de la Colección Ficción de la UV. Y eso me hizo pensar en lo relegado que se tiene el papel de Sergio Galindo al frente de dicha Editorial... Sólo para afilar colmillos, doy una lista breve de algunos de los autores que publicaron ahí: Sergio Galindo, Elena Garro, Luisa Josefina Hernández, Emilio Carballido, Jaime Sabines, Gabriel García Márquez, Juan Vicente Melo, Juan de la Cabada, Juan García Ponce, Luis Cernuda, Sergio Pitol, Salvador Novo y Elena Poniatowska. Definitivamente, que el entonces director de la Editorial tuvo una visión casi mágica. Dudo que alguna colección haya juntado tantos nombres tan tan, en el comienzo literario de varios de ellos... y quienes me conocen, saben que en esta lista hay varios de mis quereres literarios.
Pero, en fin. Sólo quería comentar mi felicidad, casi similar a la que tan bien describe Katherine Mansfield en el legendario “Bliss”, por estos dos hallazgos literarios. Ya luego, bien luego, escribiré más acerca de estos temas, porque dan para mucho: son algo así como el hilo de María Moco, que cosió un vestido y le sobró un poco...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, que tal? pues directo al grano, necesito el libro del Señor de los hongos de Sergio Galindo, dime cuanto quieres por uno de tus ejemplares, por favor, es una suplica, comunicate conmigo: vacunacion@gmail.com
Alan Sobrino

Anónimo dijo...

También me urge el de "a cada rato lunes" por lo menos dejame fotocopiarlos.... algo, por favor!!!!